La Revista Ascensores y Montacargas ha publicado una entrevista con José Ignacio Dieste, presidente de la Federación Empresarial Española de Ascensores (FEEDA) en la que analiza el sector de la elevación en España.
Desde mayo, José Ignacio Dieste es el presidente de la Federación Empresarial Española de Ascensores (FEEDA). A lo largo de su trayectoria profesional ha desempeñado distintos cargos como director de calidad en España y Europa, Project Manager en proyectos estratégicos y responsable de Operaciones de Aragón en una empresa multinacional. Antes de ser nombrado presidente, Dieste formó parte de la Junta General de la Federación desde 2009 a 2012.
¿Cómo se encuentra el sector de la elevación en España?
Según los datos de FEEDA, este año hemos superado los 1.100.000 ascensores. Durante el año pasado, se instalaron 13.500 ascensores nuevos y el volumen de negocio creció aproximadamente un 4,9%, lo que –en términos macro– supone 0,25% del PIB español. Respecto al número de empleos directos, el sector ronda los 18.900 empleados.
¿Qué destacaría de las empresas que operan en España?
En mi opinión, se trata de un sector en el que se aplican modelos de gestión y de responsabilidad social que están a la vanguardia de compañías internacionales.
¿En qué sentido?
Conceptos de gestión como integración de las personas, sostenibilidad, innovación, digitalización, seguridad y salud, fidelidad de los clientes, compromiso y bienestar de los empleados son elementos claves de la excelencia y, por qué no decirlo, de la supervivencia empresarial futura, que se pueden constatar en muchas de las empresas que operan en España.
Sostiene que el sector de la elevación es ‘influencer’. ¿Nos lo explica?
Considero que es ‘influencer’ porque es un sector que favorece los cambios y hábitos de todas las personas, debido al profundo impacto social que tiene. Un ascensor facilita y favorece el movimiento de los seres humanos de cualquier condición para alcanzar espacios, elevados, subterráneos, horizontales… independientemente del diseño constructivo. Mejora el bienestar de las personas, permite el desplazamiento en sus vidas, elimina y supera barreras arquitectónicas. Además, las empresas de ascensores tienen un gran impacto en la construcción porque prestigian conceptos arquitectónicos e incrementan el valor patrimonial de los edificios.
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