¿Estás familiarizado con la jerga del sector de la elevación? Si es así, sabrás identificar en qué consisten las tareas de instalación de un ascensor y diferenciarlas de las labores de mantenimiento o de las operaciones de modernización.
No obstante, si en alguna ocasión te han surgido dudas… ¡Este artículo es perfecto para ti!
Instalación de ascensores
El primer paso para instalar un ascensor es contactar con una empresa especializada para que valore las características de tu finca, el espacio disponible y te proponga los productos y materiales que mejor se adapten a tus necesidades.
La instalación de ascensores se produce habitualmente en las siguientes situaciones:
- Obra nueva. Supone la instalación de equipos en edificios (residenciales, comerciales, oficinas, etc.) e instalaciones de nueva creación, en coordinación con la constructora y teniendo en cuenta las preferencias del cliente. En estos casos existe una fase de planificación en la que la empresa instaladora realiza un estudio del tráfico del edificio y te orienta sobre el número de ascensores necesarios, elabora los planos de los ascensores adaptándose a las superficies disponibles, te asesora sobre la normativa vigente y colabora contigo en el diseño de los equipos para obtener los mejores acabados y la mayor integración con el edificio.
- Fincas Sin Ascensor (FSA). En la actualidad continúan existiendo muchos edificios antiguos que se proyectaron inicialmente sin ascensor (son habituales, por ejemplo, en los cascos históricos y en las zonas más antiguas de las ciudades). Por suerte, los tiempos cambian y la creatividad hace florecer soluciones de accesibilidad más avanzadas para FSA: instalar el ascensor en el exterior del edificio (adosado a la fachada) o en el interior (en forma de caracol, acordeón, aprovechando el hueco de la escalera o el del patio).
Sea cual sea tu caso, ten en cuenta que instalar un ascensor es una de las mejores inversiones que puedes hacer a largo plazo, ya que:
- Mejorará tu calidad de vida y la de tus vecinos, y garantizará la accesibilidad de todos al inmueble (incluyendo a las personas mayores y/o con movilidad reducida).
- Revalorizará el precio de tu vivienda. Si en unos años decides vender tu casa, los compradores estarán dispuestos a pagar bastante más para disfrutar de las comodidades que supone tener un ascensor.
Mantenimiento preventivo y correctivo de ascensores
El trabajo de una empresa de ascensores no termina con la instalación. De hecho, el secreto para prolongar la vida útil de tu equipo es un correcto mantenimiento.
En este punto, la primera pregunta que surge es la siguiente: ¿Es obligatorio que la empresa de mantenimiento sea la misma que instaló el ascensor? ¡Por supuesto que no! Si no te sientes cómodo con esa empresa, puedes buscar otra compañía mantenedora que cumpla con tus expectativas. Además, no tendrás problema con el acceso a repuestos, ya que todos los fabricantes están obligados a vender a las empresas autorizadas los repuestos de sustitución de los productos que fabriquen.
Por otro lado, debes saber distinguir entre dos tipos de labores de mantenimiento diferentes: las preventivas y las correctivas.
- El mantenimiento preventivo se fundamenta en la premisa de que es mejor prevenir que lamentar. Este enfoque proactivo implica la realización regular de inspecciones, ajustes y tareas de mantenimiento planificadas (como lubricación de componentes, calibraciones, reemplazo preventivo de piezas, etc.) para identificar y abordar potenciales problemas antes de que se conviertan en fallos reales.
- Por su parte, el mantenimiento correctivo no es proactivo sino reactivo: se centra en la reparación de fallos y averías una vez se han producido. Este tipo de labores suelen ser necesarias cuando un ascensor deja de funcionar o muestra signos de un problema grave (como ruidos inusuales o movimientos bruscos). Aunque es esencial en situaciones de emergencia, el mantenimiento correctivo puede resultar costoso y causar interrupciones significativas en el servicio. Además, los fallos repentinos pueden presentar importantes riesgos de seguridad para los usuarios.
Modernización de equipos
La modernización es una solución ideal para actualizar un equipo funcional ya existente. Consiste en actualizar ciertos componentes (que se desgastan y/o degradan con el uso o con el paso del tiempo) o aspectos del ascensor para mejorar su rendimiento, comodidad o estética sin llegar a sustituir por completo el equipo.
La modernización a tiempo de un equipo contribuye a:
- Cumplir con la normativa vigente en materia de seguridad, accesibilidad, etc. Téngase en cuenta que en 2024 entró en vigor la nueva ITC de ascensores que introduce nuevos requerimientos y pretende equiparar la seguridad de los ascensores ya existentes a la de los equipos nuevos.
- Mejorar el rendimiento y la eficiencia de tus equipos, así como reducir el consumo eléctrico.
- Aumentar la seguridad de los viajeros al incorporar medidas de seguridad novedosas que van apareciendo en el mercado, con independencia de la antigüedad del equipo.
- Reducir el ruido del equipo y mejorar el confort del usuario durante el viaje.
- Disminuir el número de avisos por averías (con la consecuente inversión de tiempo, dinero y medios).
- Ahorrar en costes de reparación.
- Renovar y mejorar el aspecto de los equipos, cuya estética (paneles, techo, pasamanos, suelos, botoneras, espejos, etc.) es también la «carta de presentación» del propio edificio y permite hacernos una idea del valor, estado de conservación y estilo del inmueble.
- Reducir el tiempo de inactividad por fuera de servicio del ascensor.
- Y, en definitiva, alargar la vida útil de tu equipo sin generar un gasto innecesario en una instalación completamente nueva.
Si tienes cualquier duda sobre el proceso de instalación, mantenimiento o modernización de un ascensor, el acceso a subvenciones y ayudas o la distribución de los costes entre los diferentes vecinos, no dudes en ponerte en contacto con la FEEDA o con cualquiera de sus empresas asociadas.
