A pesar de que los ascensores son parte de nuestra vida diaria, muchos mitos y creencias existen en cuanto a su funcionamiento y a su seguridad. En este artículo, desde FEEDA queremos desmentir algunos mitos y aclarar dudas sobre el funcionamiento y seguridad de los ascensores.
Mito 1: Los ascensores pueden caer al vacío si se rompen los cables
Los ascensores están equipados con numerosos sistemas de seguridad. Tienen cables de acero y pueden soportar muchas veces el peso del ascensor a plena carga y plena velocidad (coeficientes de exceso). Adicionalmente, cuentan con un sistema de paracaídas y acuñamiento (frenos) de emergencia, que se activa para detener el elevador automáticamente si se detecta una caída libre, o tan solo un incremento de la velocidad nominal, por lo tanto no existe la posibilidad de caer al vacío. Es conveniente saber, que los sistemas anteriormente descritos, actúan en subida y en bajada, ya que una sobre velocidad, (por el motivo que sea), puede ser en bajada, pero también en subida, dependiendo de la carga de la cabina y su relación con el contrapeso
Mito 2: Si el ascensor se queda atrapado, te quedarás sin aire
Los ascensores, por normativa en Europa, tienen suficiente ventilación para garantizar el flujo del aire en todo momento; aunque el ascensor se detenga, no hay riesgo alguno de asfixia, están diseñados para permitir la circulación de aire desde el exterior.
Mito 3: Saltar dentro del ascensor puede hacer que se desplome
Aunque al saltar dentro de un ascensor, puede hacer que se detenga temporalmente para garantizar la seguridad, es poco probable que provoque la caída. Haciendo esto, los cables podrán patinar sobre la garganta de las poleas, dando lugar a una avería y la consiguiente parada, con rescate de personas incluido, ya que el ascensor, probablemente, no podrá parar al nivel de la planta, activándose distintos sistemas de seguridad.
Mito 4: Se puede abrir la puerta del ascensor y caer al vacío
Las puertas de los ascensores cuentan con enclavamientos automáticos que impiden la apertura de las puertas si la cabina no está alineada correctamente con el nivel de planta del edificio. Por lo tanto, no existe ese peligro de caída. Ahora bien, una manipulación incorrecta o intencionada de la puerta, puede hacer que la puerta se abra cuando el ascensor no está en la planta con el consiguiente riesgo. Por eso, es primordial que la manipulación por cualquier motivo de las puertas , la haga personal acreditado de la empresa mantenedora, en vez de personal de la comunidad de vecinos, conserjes, o vigilantes. La nueva ITC así lo recoge.
Mito 5: Presionar varias veces el botón hace que llegue más rápido
Pulsar repetidamente el botón del ascensor no hace que el tiempo de llegada se acorte. Los ascensores funcionan siguiendo un algoritmo que se basa en la prioridad de las llamadas, el sentido de la marcha y la carga disponible de la cabina, por lo tanto, el tiempo de espera es el mismo. Es importante recordar, que cuando hay dos botones en pasillo, uno de subida y otro de bajada, el que debemos pulsar es el del sentido de la marcha que queremos. Así, si queremos subir, pulsaremos únicamente el botón de subida y viceversa. Nunca pulsaremos los dos, ya que la maniobra del ascensor, interpretará que en esa planta hay personas que quieren hacer recorridos diferentes y se alargarán muchísimo los tiempos de espera y los viajes.
Mito 6: En caso de incendio se puede usar el ascensor
En caso de incendio, no se debe usar el ascensor y en su lugar se recomienda utilizar las escaleras, ya que el ascensor en un fuego puede llegar a estar fuera de servicio o también llenarse el hueco del ascensor de humo lo que dificultaría la evacuación. Por otro lado, en muchos edificios, hay uno o varios ascensores, dotados con maniobra de bomberos que es un sistema que bloquea el ascensores para que slo los bomberos puedan usarlo según el protocolo de actuación que tengan para cada incidencia posible.
Mito 7: Los ascensores tienen un límite de peso, pero pueden subir, aunque se sobrecarguen
El peso de un ascensor está determinado por la capacidad del motor y el tamaño de la cabina. Esta proporción está regulada por normativa, pudiendo hacerse una cabina pequeña (pocas personas) con un motor de mucha capacidad, pero nunca al contrario. En el caso de superar el peso máximo, los sensores de seguridad evitan que el ascensor funcione hasta que se reduzca el peso. De este modo, no hay sobrecarga del motor y, por tanto, garantiza la seguridad del pasajero. En ascensores que todavía no tienen esta tecnología, lo que ocurrirá es que los cables se deslicen dentro de las gargantas de las poleas, dando lugar a una parada por sobre carga y el consecuente posible rescate de las personas, ya que el ascensor, no se quedará parado a nivel de la planta y las puertas no se abrirán.
Mito 8: Un ascensor puede caer si hay un corte de luz
Los ascensores más modernos tienen un sistema de alimentación de emergencia, lo que significa que, en caso de apagón, la cabina se colocará en el piso más cercano y abrirá automáticamente de forma segura las puertas del ascensor, permitiendo al pasajero salir. En los ascensores si este sistema, se parará con la luz de emergencia activada y los técnicos de mantenimiento acudirán para mover el ascensor manualmente de forma controlada y rescatar a las personas en su interior.
Mito 9: Si te quedas atrapado en un ascensor no se entera nadie
La mayoría de los ascensores en España y desde la entrada en vigor de la nueva ITC, serán todos, disponen de un sistema de comunicación bidireccional con un centro de emergencia 24/7 que suele ser el de la misma empresa mantenedora. Este sistema funciona, independientemente de si hay o no electricidad en el ascensor y funciona con una tarjeta SIM o similar con una línea de teléfono dedicada. Por tanto, si el usuario se ve en esa situación , siempre se puede comunicar para dar el aviso, con el centro de emergencia que procederá a su rescate de forma inmediata, tal y como obliga la ley y la normativa.